Fin de aportes obligatorios a cámaras empresariales desata guerra entre entidades
La decisión del Gobierno de eliminar los aportes compulsivos a cámaras sectoriales generó un fuerte cruce entre distintas entidades. Mientras algunas celebran la medida como un “alivio”, otras la cuestionan y advierten sobre el daño a la representación patronal. Hay denuncias cruzadas y pedidos de intervención.
El Gobierno nacional, a través del Decreto 149/2025, eliminó la obligatoriedad de los aportes económicos que las empresas debían realizar a ciertas cámaras sectoriales, transformándolos en contribuciones voluntarias. Esta medida, impulsada por el ministro Federico Sturzenegger, fue recibida con entusiasmo por algunas entidades como la Cámara Argentina de Distribuidores y Autoservicios Mayoristas (Cadam), que la considera un “alivio” de 70.000 millones de pesos anuales para el sector mercantil.
Sin embargo, la decisión gubernamental desató una ola de críticas por parte de otras cámaras empresariales, que la ven como un debilitamiento de la representación patronal frente a los sindicatos. Argumentan que muchas cámaras dependen de estos ingresos para su funcionamiento y cuestionan la orientación política de la medida. La Confederación Federal Pyme Argentina fue más allá y pidió la intervención de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came), denunciando falta de transparencia en el manejo de los fondos de capacitación y acusando a la entidad de perjudicar a sus socios.
Las entidades más afectadas por la medida confían en poder revertirla, argumentando que los aportes están incluidos en convenios colectivos de trabajo y, por lo tanto, son un acuerdo entre privados en el que el Gobierno no debería intervenir. No descartan la posibilidad de judicializar la medida. Mientras tanto, otras cámaras se encuentran analizando los detalles y el impacto de la nueva normativa.
La polémica desatada por la eliminación de los aportes obligatorios pone de manifiesto un debate que lleva años en el sector empresarial: la falta de representatividad en muchos rubros. La medida gubernamental reaviva la discusión sobre el rol de las cámaras empresariales y su financiamiento, generando divisiones y tensiones en el ámbito patronal.
